La popularidad de las manzanas ecológicas ha crecido tanto que la demanda de esta fruta ha superado la oferta. En el estado con la mayor producción de manzanas tanto convencionales como ecológicas, Washington, los productores están incrementando la producción ecológica para satisfacer este aumento de la demanda.

«La demanda de manzanas ecológicas supera la oferta claramente», dice Tim Evans, de Chelan Fresh Marketing. «El año pasado estábamos más equilibrados, cuando tuvimos más cosecha, pero este otoño es un poco menor y la demanda de ecológicos se ha incrementado mucho en los últimos años». Apunta a las actitudes cambiantes en cuanto a la alimentación como uno de los impulsores de ese crecimiento. Los consumidores son más conscientes de cómo se cultivan sus alimentos y cada vez están más dispuestos a pagar los precios más altos que pide la fruta ecológica. Los productores están respondiendo con más hectáreas dedicadas al cultivo ecológico.

«Tenemos varios cientos de hectáreas que se están transformando a la producción ecológica», indica Evans. «Queremos llevar nuestra producción ecológica a un nivel que cubra la demanda del consumidor». En todo el estado, muchos productores están sumándose a la tendencia y están aumentando la producción ecológica.

«Nuestro programa ecológico está mejorando actualmente y es nuestra principal área de crecimiento», señala John Onsta, de Sage Fruit. «La verdad es que no creo que la demanda de manzanas ecológicas disminuya. El único factor limitante es lo que podamos producir». Añade que, como los compradores de fruta ecológica también entienden de variedades de fruta, las más demandadas son las que destacan en el mercado, como las Fuji, las Gala y las Honeycrisp.

Las manzanas han tenido buena acogida en el mercado ecológico
Como las manzanas son un producto básico de las tiendas minoristas, son un buen punto de entrada para los consumidores interesados en la fruta ecológica. Su ubicuidad en el pasillo de las frutas y hortalizas es otro factor en cuanto al crecimiento de la categoría de la manzana ecológica.

«La manzana es una de las frutas primarias, por lo que es un buen punto de entrada hacia el mundo de lo ecológico para muchas personas», explica Addie Pobst, de Viva Tierra Organic. Como todo el mundo conoce las manzanas, es probablemente uno de los primeros productos ecológicos que introducirá un minorista.

«No me imagino entrar en una tienda en los Estados Unidos y que no tengan manzanas», señala Pobst. «Y si una tienda vende alguna fruta ecológica, seguro que tendrá manzanas». Además de aumentar la superficie, los productores y los comercializadores también han ideado formas de vender la fruta ecológica. Las manzanas ecológicas se siguen vendiendo a granel en la mayoría de las tiendas, pero las bolsas de fruta son cada vez más comunes, y esas bolsas van bien para la fruta ecológica, en particular.

«La aparición de las bolsas de 900 gramos y 1,4 kilos captan la atención del consumidor y lo informan de que es un producto de valor», apunta Pobst. «A los minoristas también les gustan porque existe menos riesgo de que una manzana ecológica se mezcle con la fruta convencional, por lo que las bolsas han ganado importancia en el negocio en los últimos diez años».

Fuente: www.portalfruticola.com
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