Huertos modernos y tecnología pueden reducir potencialmente los gastos de producción
El costo de producción de manzanas ha estado subiendo más rápido que lo esperable, principalmente debido a la suba de los costos de mano de obra, pero los gastos pueden ser compensados por rindes más altos, Tom Auvil, horticultor investigador para la “Comisión Investigadora de Frutales” de Washington, dijo a los productores durante la “Reunión Anual de la Asociación de Frutales” del Estado de Washington en diciembre. Cuanto más alto el rinde, más bajo el gasto de producción por unidad
“Hoy nosotros contamos con un número de empresas que han completado exitosamente la producción anual de 100 bines de Gala por acre, por lo tanto ellos están administrando sus gastos muy bien”, expresó. “Este es uno de los momentos más excitantes de la industria. Hay muchos sistemas de producción distintos que producen altos rindes y un producto de alto valor”.
Además, siendo más productivos, los sistemas modernos pueden acomodar la tecnología de ahorro de mano de obra tal como plataformas y equipamiento asistido mecánicamente.
También está el potencial para la cosecha robótica en los próximos años, pero no funcionará en huertos donde los árboles tienen ramas largas y elásticas, advirtió Auvil.
“Se requiere de todo un paradigma diferente sobre la forma en que nosotros podamos y preparamos la canopia a fin de maximizar el costo del cosechador robótico”.
Adoptar nueva tecnología no significa necesariamente arrancar todo el huerto, acentuó Auvil. El injerto puede ser una solución viable para cambiar a una variedad diferente o a un nuevo sistema de producción rápidamente.
Sin embargo, los productores son fácilmente disuadidos de adoptar nueva tecnología si están inciertos acerca de cuán exitoso todo esto será. Aún ciertas sutilezas o pequeños problemas pueden crear dificultades para la aceptación.
“He descubierto que el fracaso de una discusión de café necesita alrededor de diez episodios exitosos para superar un desafío insignificante”, dijo.
Para los productores preocupados por el costo de la implementación de nueva tecnología, Auvil dijo que se pueden introducir nuevas ideas gradualmente. Por ejemplo, en su nuevo huerto le llevó cinco años cambiar de escaleras de madera a las de aluminio en los ´70.
“Cuando miramos las herramientas para cosecha, nunca las compramos todas juntas en un año”, dijo. Por lo tanto, cuando comenzamos a mirar herramientas realmente caras en el futuro, no tenemos que equipar todo el huerto de una vez. En realidad, cuanto más caro es este tipo de herramienta, necesitamos asegurarnos conocer la forma de hacerlas funcionar bien antes de comprar o alquilar la segunda.
Renovación del huerto
Clark Seavert, economista agrícola de la Universidad del Estado de Oregon, dijo que cuando los productores plantan o renuevan un huerto, ellos tienden a enfocarse demasiado en el costo y no lo suficiente en contar con las variedades y sistemas de entrenamiento que generarán los precios para la fruta y rendimientos que necesitarán para tener éxito.
Los tres factores clave para la renovación exitosa del huerto (en orden de importancia): precio de la fruta; rendimiento (cuánto y cuándo); y costos de creación y producción.
Hace treinta años atrás, un rinde de 40 a 50 acres era considerado bueno, dijo Seavert. Aún cinco años atrás, rindes de 75 bines eran impresionantes. Ahora, rindes de 80 a 100 bines por acre no son excepcionales.
Sin embargo, los costos también han subido, con gastos de inicio tan altos como $45.000 por acre, y los márgenes se hacen más finos.
Existen dos estrategias comerciales diferentes que los productores pueden adoptar. Una es jugar a ganar, con el foco en las recompensas, y la otra es jugar a no perder, con el foco en medición del riesgo. Un productor podría caer en ambos campos en momentos diferentes, dependiendo de lo que esté tratando de lograr, dijo Seavert.
Jugar a ganar incluye maximización del beneficio y adopción de nuevas tecnologías. Aquellos que juegan a no perder adoptarán una modalidad de “esperar y ver”, lo cual no es algo necesariamente malo, acentuó.
Si se puede hacer dinero, ambos grupos harán dinero, pero aquellos jugando a ganar harán más.
Seavert recomendó que los productores desarrollen un plan comercial a cinco años. Hoy en día, un plan a 10 años es una franja demasiado larga debido a la rapidez en que las cosas cambian.
El plan debería incluir objetivos específicos, de modo que se pueda monitorear el progreso. Por ejemplo, un objetivo podría ser aumentar el ingreso bruto a $25.000 por acre, o aumentar ingreso neto al huerto en 5% anualmente, o mejorar la eficiencia de mano de obra adoptando nuevas tecnologías.
Aunque los productores han hecho dinero suficiente en años recientes para financiar nuevos proyectos y compras sin préstamos bancarios, Seavert dijo que ellos deberían usar financiamiento adecuadamente y no acortar su capital de trabajo.
Recomendó plantar variedades que llenen blancos en la ventana de cosecha para poder usar mano de obra y maquinaria de modo eficiente, y dijo que los productores deberían prepararse para una cosecha completamente automatizada.
Fuente: Good Fruit Grower
Traducción: CAFI
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