Si las perspectivas del comienzo de la temporada de fruta de pepita neerlandesa eran malas debido a la gran cosecha y al boicot ruso, ahora muchas manzanas y peras se están abriendo camino a los mercados nacionales y de exportación. «Hemos empezado cuatro semanas antes, lo que supone que quedan muchos menos kilos. En cuanto a los kilos, hay los mismos que el año pasado, así que vamos por el buen camino», concluye Zweer van Aalsburg, de Fruitmasters.
«Al comienzo de la temporada había mucha presión en el mercado, sobre todo debido a los productores que normalmente dan en arriendo su producto. Esto ha supuesto la falta de bandejas o cámaras frigoríficas disponibles. Ahora, la situación se ha estabilizado. Los precios de las peras generalmente rondan los 40 y 50 céntimos, algo bastante aceptable.

Las ventas están más repartidas que nunca, pues China se ha incorporado como destino», dice Zweer.
«Ocurre casi lo mismo con las manzanas. Los supermercados han tenido muchas ofertas y estamos viendo sus efectos. Ya hay menos manzanas Elstar y menos Jonagold disponibles en el mercado. Debido a que las cámaras están llenas y que la coloración es mala, gran parte de la cosecha se ha destinado a la industria transformadora. A esto se añade la intervención y la regulación verde, pero ahora hay verdadera calma en el mercado. El precio de las Elstar ronda los 40/45 céntimos e incluso los 50 céntimos para los buenos calibres. Espero un incremento de las Elstar. La Jonagold también podría aumentar un poco, pero es más difícil debido a la presión de las baratas manzanas polacas».